¡Vamos Argentina!

Esta suspensión temporal de la realidad logra un grado de unificación en la gente muy pocas veces visto en otras oportunidades. Por ejemplo, todos alentamos unánimemente tanto a Riquelme y Palacio, exponentes de la camiseta azul y amarilla, como a Crespo y Saviola, productos de la cantera riverplatense.
Soy de la idea de que si nuestro fútbol fuese realmente superior, el mundial sería un evento menor comparado con nuestro torneo local, y solamente armaríamos una Selección con juveniles, como para que vayan ganando experiencia. Pero no es así, y en su debut la Selección terminó aguantando un resultado ante la pobre Costa de Marfil.
Flor y Nacho no están ajenos a este ambiente mundialista, y en la previa al partido "hicieron el aguante" con la bandera al hombro, mientras disfrutaban de una espléndida tarde de sol en Buenos Aires.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home